TESTIMONIO SOBRE El EXORCISMO DEL DEMONIO

Todo sucedió el 20 de noviembre del 2016.

Los familiares de una enferma mental acudieron al ministro de la Iglesia de Kóvel Vasily Makarus. De acuerdo con sus palabras, esa mujer afirmaba que había caído en el estado de loca furiosa. Hablaba de esto solo al principio de lo que había sucedido. Después empezó a empeorar y no volvió a hablar del tema. Los familiares de aquella mujer, al ver su desgracia, pidieron al ministro de la Iglesia de Kóvel, Vasily Makarus, que expulsara de ella al demonio con el Poder de Dios. Por aquel entonces se había vuelto muy cruel y rabiosa. Su salud mental estaba muy perjudicada. He aquí algunos ejemplos de su terrible comportamiento: se abalanzaba sobre la gente con gran rabia, incluso, a veces, agitaba un cuchillo y gritaba que iba a matar a todo aquel que viera, incluso a sus familiares. Al abalanzarse sobre la gente intentaba herir cualquier órgano vital del cual dependiera la vida de la gente. La mujer loca furiosa intentaba con todas sus fuerzas pegarles en el pecho a las mujeres, en las mamas. Si otra mujer llevaba ropa de invierno, entonces, con la reacción de una bestia salvaje, le pegaba en la cara e intentaba sacarle los ojos o arrancarle el pelo. Arrancaba mechones de pelo a la gente, dejando calvas en la cabeza. Al irrumpir en la habitación de su madre, la agarró con las dos manos por el pelo y empezó a arrastrarla de un lado a otro. Entonces su madre comenzó a gritar y a pedir ayuda, ya que entendió que su hija quería matarla. Al oír sus gritos, sus familiares fueron a auxiliarla y salvaron a la madre. La mujer loca intentó arrancar los ojos a uno de los hombres mientras gritaba que iba dejarle ciego. Después, al abalanzarse sobre él por la espalda, le clavó las uñas en sus ojos y le arañó la cara. Casi no le dio tiempo a cerrar los ojos y se liberó de ella con gran dificultad. Su cara estaba sangrando. Mostraba las habilidades y la fuerza de una bestia fiera, no era consciente de nada y no entendía nada al atacar a familiares y extraños. Todo esto estaba impregnado de una gran fuerza del mal. Sus familiares no sabían qué hacer, dormir en casa daba miedo, pues temían morir. El ministro Vasily Makarus, reconociendo la dificultad de los hechos, se dio prisa en llegar a la casa donde se encontraba la enferma. Llamó a la hija de la enferma y le preguntó: «¿Crees que, en el nombre de Jesús Cristo, el Hijo de Dios, con la autoridad de Dios nuestro Padre, Que está en los Cielos, yo puedo expulsar de tu madre al espíritu inmundo, al espíritu del mal y al espíritu de la oscuridad?» Y ella contestó: «¡Creo!» El ministro dijo: "¡Gloria al Dios Vivo!"

Después de eso, el ministro de la Iglesia de Kóvel se acercó a la enferma, ella se tranquilizó, dejó de moverse y parecía que, asustada, esperaba algo. El ministro de Dios Vasily Makarus, al dirigirse al espíritu inmundo, dijo: "¡espíritu inmundo, espíritu del mal y espíritu de la oscuridad, en el nombre Jesús Cristo, el Hijo de Dios, con la autoridad de Dios nuestro Padre, Que está en los Cielos, te mando, sal de esta mujer y no entres más en ella!" Después de esas palabras el espíritu inmundo salió de la enferma mental y la autoridad brutal del espíritu inmundo nunca más hizo en ella. Al hacerle preguntas, la enferma comenzó a contestar con tranquilidad y después se acostó en la cama y se durmió.

Así se cumplieron las palabras de Jesús Cristo, el Hijo de Dios: "Id proclamando que el Reino de los Cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, purificad leprosos, expulsad demonios. Gratis lo recibisteis; dadlo gratis" (Mateo 10:7-8).

Grupo de oración de la Iglesia de Kóvel, fundada e

Ucrania

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